En Happy Place Home Daycare, nuestra Misión es desarrollar un proceso de enseñanza orientado a la excelencia, proporcionando conocimientos sólidos que contribuyen al desarrollo integral de los niños y niñas. Buscamos generar una experiencia enriquecedora y satisfactoria tanto para los pequeños como para sus familias, garantizando siempre un ambiente seguro, inclusivo y acogedor. Atendemos con dedicación a bebés, niños y niñas en edad preescolar y escolar, promoviendo su participación activa y el desarrollo de sus capacidades en un entorno de confianza y cariño.VISIÓNAspiramos a convertirnos en un referente en educación infantil y cuidado integral, destacando por la promoción de valores, el respeto a la diversidad y la creación de entornos de aprendizaje innovadores. Queremos formar parte de una comunidad donde todos los niños y niñas se sientan amados, respetados, incluidos y empoderados para descubrir su máximo potencial. Nuestro compromiso es crecer junto a las familias, sembrando bases firmes para el futuro de cada niño.VALORESNuestro principal valor son los propios niños y niñas, con sus particularidades, talentos y formas únicas de ver el mundo. Cada uno de ellos es el corazón de lo que somos.Otros valores fundamentales que nos definen son:Amor y respeto: Tratamos a cada niño con afecto, empatía y dignidad, valorando su individualidad.Inclusión: Creemos en un espacio donde todos los niños, sin distinción, se sientan parte importante del grupo.Seguridad y confianza: Creamos un entorno donde los pequeños puedan explorar, aprender y crecer con total tranquilidad.

2 años 6 meses

• Ambiente hogareño y acogedor Los niños se sienten como en casa, lo que les ayuda en la adaptación y genera confianza. Grupos pequeños Menos niños que en una guardería tradicional, lo que permite una atención más personalizada y mejor supervisión. Relación cercana con las familias Comunicación más directa y abierta con los padres, fomentando confianza y colaboración. Flexibilidad en horarios y rutinas Más disposición a adaptarse a las necesidades de cada familia (horarios, comidas, siestas, etc.). Atención individualizada al desarrollo Se pueden ajustar actividades al ritmo y personalidad de cada niño. Menor exposición a enfermedades Al tener menos niños en el grupo, el riesgo de contagios se reduce. Mayor estabilidad de cuidador En muchos casos, los niños tienen siempre a la misma persona a carga, fortaleciendo el apego y la seguridad emocional. Costo competitivo Suelen ser más económicos que los centros grandes, aunque dependen de la zona. Inclusión de valores familiares El entorno permite transmitir rutinas, valores y costumbres que se alinean más fácilmente con las familias. Ubicación conveniente Generalmente están dentro de comunidades residenciales, lo que resulta cómodo y cercano para los padres.

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